¿QUÉ ES EL TESTAMENTO?
El testamento es un instrumento legal otorgado ante un notario en el que una persona plasma su voluntad sobre el destino de sus bienes y derechos para después de su fallecimiento.
Además de representar un ahorro económico para tus herederos o legatarios, el testamento facilita el proceso de sucesión, ya que de no existir se debe tramitar la sucesión a través de un proceso judicial en el que un juez determinará quiénes son los herederos y en qué porcentaje recibirán los bienes. Este proceso suele ser costoso y lento.
Asimismo, el testamento es la mejor forma para proteger a los hijos menores de edad o discapacitados, designando a un tutor que tenga el cuidado y la guarda de su persona y bienes. Finalmente, es la mejor forma de proteger la armonía y la seguridad familiar en caso de muerte, evitando posibles conflictos legales.
Para otorgar testamento:
-No tienes que esperar a ser un adulto mayor.
-No es exclusivo de las personas con hijos.
-No es definitivo, puedes otorgarlo cuantas veces lo desees.
-Tus bienes se reparten hasta después de tu fallecimiento.
Beneficios:
-Decides a quién heredas tu patrimonio.
-Evitas problemas futuros entre familiares y juicios costosos.
-Garantizas que tu voluntad se cumplirá.
-Ofrece seguridad jurídica
¿Qué necesito para hacer mi testamento?
-Acudir al notario público.
-Identificación oficial.
-Documentos de propiedad de bienes en el caso de ortorgar legados.
-Tetigos solo en caso de no saber leer, escribir o firmar, no hablar español o tener alguna discapacidad visual o auditiva.
Datos necesarios:
-Determinación de herederos o legatarios.
-Nombramiento de albacea.
-Tutor en caso de herederos menores de edad.
-Datos del testador (nombre, lugar, y fecha de nacimiento, nacionalidad, ocupación, domicilio, estado civil, nombres completos de su familia, padres, esposo (a) e hijos).
Existen algunos mitos en torno al otorgamiento de testamento, uno de ellos es la creencia de que quien piensa en ello es porque ya va a fallecer o que es un acto que solo deben hacerlo las personas adultas mayores, o incluso el percibir su realización como un mal presagio de evetos desafortunados. Ninguna persona tiene la vidad comprada y otorgar testamento es dejar todo en orden para no heredar problemas a tus familiares.
La cultura de la previsión es fundamental. Acudir sin prejucios a otorgar testamento es un acto de responsabilidad.